1. ¿Se dedica el osteópata únicamente a solucionar los problemas de los huesos?
La respuesta es NO.
Quizás sea la pregunta más frecuente que nos hacen y es porque el nombre de la profesión puede inducir a error.
OSTEO (estructura) + PATHOS (sufrimiento)= Estudio de los daños producidos en la estructura.
OSTEO (estructura) + PATH (camino)=El camino a través de la estructura.
El osteópata analiza todas las estructuras del cuerpo incluidos los huesos, articulaciones, ligamentos, músculos, tendones, así como el resto de estructuras corporales: órganos, vísceras, nervios y vasos. En el cuerpo todo está interrelacionado y dependientes unas estructuras de las otras, por ello hay que analizar estas relaciones para solucionar cualquier disfunción orgánica.
2. ¿En qué se diferencia la osteopatía de la medicina convencional?
El objetivo fundamental de la medicina convencional es establecer un diagnóstico de la dolencia del paciente, focalizando la atención en un órgano o sistema desde una especialidad médica. El diagnóstico diferencial busca la patología en ese sistema mediante análisis o pruebas complementarias, y se centra en aquello que ha superado los límites que se consideran normales, planteando un tratamiento para eliminar ese proceso de manera local mediante el uso de medicación o cirugía. Sin embargo, cuando el problema no es patológico sino funcional, se limita a calmar los síntomas con fármacos (analgésicos, anti-inflamatorios, etc).
La diferencia fundamental con la Osteopatía es que ésta no parte de un análisis local del problema sino que el análisis es siempre global, buscando la causa lógica de la aparición de los síntomas. Comprendemos que el síntoma es una señal de alerta que no hay que suprimir sin encontrar previamente la causa responsable del mismo, con el objetivo de reestablecer el correcto funcionamiento del cuerpo. Al reequilibrar en osteopatía la estructura se activa también la función correspondiente a la misma y con ello desaparecen los síntomas.
En Osteopatía dos personas con la misma dolencia reciben un tratamiento diferente, ya que se tienen muy en cuenta las características individuales de la persona. En la medicina convencional en cambio, basados en la ciencia estadística y en los protocolos de actuación, de forma general todos los pacientes con la misma dolencia reciben el mismo tratamiento.
3. ¿Es cierto que la Osteopatía puede solucionar migrañas, cefaleas tensionales y neuralgias?
Existen diferentes tipos de migrañas según las estructuras causantes de los síntomas: pueden ser de origen vascular (vasoconstrictoras o vasodilatadoras), o neuralgias por irritación del nervio de Arnold, del nervio facial o del trigémino. Podemos encontrarlas hemicraneales o afectar a toda la cabeza. Pueden ir acompañadas de vómitos, fotofobia, intolerancia al ruido y son muy incapacitantes.
El osteópata estudiará cada caso y analizará entre otros elementos, las diferentes suturas craneales tapizadas por tejido membranoso (meníngeo) a través del cual pasan estos vasos y nervios, y cuya retracción puede irritar o comprimir dichas estructuras provocando la aparición del dolor.
En otros casos la causa puede ser metabólica, entonces el objetivo será mejorar la circulación con consejos de alimentación que reduzcan la posibilidad de una reacción inflamatoria vascular, así como favorecer las vías de eliminación de toxinas del organismo.
En el caso de las cefaleas tensionales el porcentaje de éxito con un tratamiento osteopático es muy elevado. Hay una relación directa con los problemas vertebrales que provocan una compresión en la base del cráneo ( y con ello una congestión del drenaje venoso yugular), o bien que se trate de un dolor reflejo por simple contractura.
4. ¿Cómo trata la Osteopatía la hernia de disco? Me han planteado que tengo que operarme y quisiera una segunda opinión
Posiblemente su médico le ha hecho un TAC o una RNM y ha observado que tiene una hernia discal que está comprimiendo una raíz nerviosa, y ha determinado que esa es la causa de su dolor.
El osteópata va a analizar y a intentar modificar las causas mecánicas que han ido forzando su columna y han hecho que con el tiempo, haya salido una hernia discal. El objetivo es cambiar la manera en que su columna funciona, descomprimiendo y reestableciendo el buen funcionamiento de ésta. Con ello daremos la posibilidad al cuerpo de reducir el proceso inflamatorio local, deshidratar y fibrosar (cicatrizar) de forma natural la hernia para que deje de irritar la raíz nerviosa y provocar dolor.
5. ¿Puede un osteópata tratar a mi bebé?
Un niño puede recibir la ayuda del osteópata desde el momento en que nace. Es importante valorar si tu bebé a sufrido alguna retracción durante todo el proceso del parto como consecuencia de las contracciones uterinas, el proceso de encajamiento y expulsivo del canal del parto, uso de fórceps o ventosas, posibles faltas de oxigene por sufrimiento fetal o derivados de la anestesia epidural.
Hay que tener muy en cuenta que todos los huesos del bebé, incluidos los del cráneo tienen que formarse, crecer y osificarse, que en el momento de nacer no hay huesos duros sino membranas y cartílagos que son sensibles a las presiones. Por ello, si éstos reciben una presión excesiva en el vientre materno o durante el parto, genera una reacción de defensa y tensión en el tejido que debemos relajar lo antes posible, para que al crecer y osificarse no de problemas de función (la forma exterior puede ser buena pero estar alterada alguna función).
Por ejemplo, en la formación de las caderas podría hacer que su hijo no gatee o no lo haga correctamente; en la formación de los pies puede llevar a sufrir de pies cavos o planos; en la formación de la columna puede desembocar en una escoliosis en la adolescencia. A nivel digestivo es frecuente ver como una retracción de las membranas facilita la aparición del cólico del lactante y reflujos gastro-esofágicos.
Por otro lado, durante la osificación de los huesos del cráneo y con las fontanelas todavía abiertas se pueden generar alteraciones en las suturas articulares y ello desembocar en que el niño manifieste irritabilidad, insomnio, problemas de atención y rendimiento escolar, problemas de comportamiento, alteraciones en el ritmo de crecimiento, etc., así como alterar la correcta movilidad ocular y la formación de una correcta arcada dental.
6. En un deportista, ¿puede la Osteopatía prevenir lesiones y mejorar su rendimiento?
Las manipulaciones van a mejorar sus ejes de movimiento y lograr un mejor equilibrio del tono muscular, consiguiendo con ello un movimiento más fisiológico y eficiente (menor gasto de energía). Todo ello va a repercutir en una mejora en la coordinación y en una menor probabilidad de lesiones musculares o ligamentosas. Por otro lado, la liberación de la movilidad del tórax y la mejora del movimiento del diafragma, pueden mejorar la capacidad respiratoria y cardiaca y con ello la resistencia aeróbica al esfuerzo.
Al mismo tiempo el osteópata puede asesorarle sobre consejos nutricionales para evitar la acidez metabólica, la cual favorece lesiones musculares e impide una correcta recuperación al esfuerzo.
7. ¿Puede la Osteopatía ayudar a un persona de 80 años con dolores generalizados por el desgaste-artrosis?
No existe límite de edad para poder ayudar a un paciente en osteopatía. Se adaptan las técnicas a las necesidades y características concretas de cada persona, de ahí que se puedan tratar desde bebés, mujeres embarazadas como personas mayores.
El proceso degenerativo es fisiológico con la edad. Nuestras articulaciones pierden el cartílago que las cubre y lubrica, los discos y meniscos se secan y fisuran, los huesos se hacen más frágiles y nuestra movilidad se reduce.
El mejor freno a este proceso es el MOVIMIENTO: mejora la circulación, la calidad del líquido sinovial de las articulaciones, mantiene el tono muscular y ligamentoso, y es además el estímulo que necesitan los huesos mantener su masa ósea. Por el contrario, la ausencia de movimiento produce pérdida muscular, isquemia, edema y finalmente necrosis tejido.
Nuestro objetivo será devolver a aquellas estructuras desgastadas el mejor equilibrio funcional posible, y un mejor rango de movilidad que permita activar de nuevo la circulación. Es importante también dar consejos de alimentación, ejercicio e higiene postural para mejorar la calidad de vida.